Estudio Rural Calaceite para 2 personas

Dormitorio:

Habitación doble de matrimonio 135cm x 190cm
Mesa
Televisión
Armario

WC: baño completo

Pequeña Cocina: microondas, frigorífico, dos fogones eléctricos, utensilios cocina

Exteriores: Balcón

Climatización: Aire Acondicionado y Calefacción

Aparcamiento: Parquing para vehículos opcional en el mismo alojamiento, el precio es de 5 € la noche

Wifi gratuito

Autoservicio de lavandería (consultar condiciones)

Sala de juegos y reuniones: billar, ping pon y futbolín. Consultar condiciones de acceso

Terraza común

Otros servicios: Información turística, toallas y ropa de cama

El Matarraña es una de las diez comarcas de la provincia de Teruel, situada en el extremo este de la provincia aragonesa. Limitada con las provincias de Zaragoza (norte), Tarragona (este) y Castellón (sur). Su distancia con Zaragoza es de 139 kilómetros, de Barcelona a 205 kilómetros y de Valencia a 255 kilómetros.

Con una extensión de 933 km² y una población total de 8.894 habitantes constituyen los 18 municipios que hay en El Matarraña. Su capital de comarca es Valderrobres situada en el centro del ella. Su comarca la conoce como su capital administrativa la de Valderrobres y la de Calaceite como su capital monumental.

Tiene un clima mediterráneo, con precipitaciones irregulares y unas temperaturas bajas en invierno, en la zona más alta se pueden alcanzar -15ºC y en verano en la zona más baja los 40ºC. En primavera y otoño la temperatura suele ser de unos 20ºC.

Hay que nombrar los diferentes ríos que la traviesan, gracias a ellos hacen un paisaje espectacular en toda su la zona. El río Matarraña que es un afluente del río Ebro, el río Pena es un afluente del río Matarraña con desembocadura al Embalse de Pena, el río Ulldemó es un afluente del río Matarraña que está en la zona de la Peixquera de Beceite y el río Tastavins también afluente del río Matarraña donde se puede apreciar una espectacular cascada de 20 metros en El Salt de la Portellada.

Arquitectónicamente hay una gran riqueza cultural en cada uno de sus pueblos, cada uno tiene un enclave muy importante y aunque muchos de los edificios son de estilo barroco cada uno tiene su particularidad y su historia ya sean iglesias, antiguos lavaderos, portales de entrada al núcleo urbano, ayuntamientos con sus lonjas o las cárceles que muchas de ellas se pueden visitar i forman parte de la Ruta de las Cárceles del Matarraña.

Para los amantes de la natura, el senderismo, pasear en bicicleta o bañarse en el río, el Matarraña es un lugar perfecto, con más de treinta rutas distribuidas por toda la comarca en medio de la natura y todas ellas indicadas como la Vía Verde de Val de Zafán, El Parrizal, Les Roques del Masmut, el GR-8…

Nuestros antepasados íberos nos dejaron un gran valor patrimonial y cultural que gracias a los grandes arqueólogos de la comarca se pueden visitar en diferentes poblaciones. Se pueden visitar poblados íberos como el de Poblado Íbero de San Antonio y el Tossal Redó en Calaceite, el de Castellans en Cretas, el de San Cristóbal en Mazaleón o la Torre Cremada y el Tossal de Montañés en Valdeltormo.

Los productos gastronómicos y sus platos son una delicia para toda la gente que visitan el Matarraña. El Jamón de Denominación de Origen Teruel es uno de los productos estrella de la comarca junto con sus embutidos elaborados en las carnicerías de los pueblos como también se pueden encontrar quesos de cabra y oveja.

El vino, la mistela y el mostillo con las variedades de garnacha blanca y negra, macabeo o chardonnay y tempranillo.

El aceite, comarca muy productora de aceite gracias a sus impresionantes campos de olivos que se pueden observar desde la misma carretera.

La gastronomía es variada si lo que se quiere es comer un plato típico en Calaceite es el coc de pimentó (coca salada con tomate, pimiento y atún), la cassolada (arroz con tortos y costillas de cerdo) y la cassolada de l’hort (verduras y caracoles), en Valderrobres el ternasco o cabrito, los escabechados de perdiz, la codorniz y el conejo, en Beceite el ternasco asado y el arroz con conejo y en la Fresneda, el Ternasco de Aragón.

Para los más dulces hay un gran surtido para probar como los ametlats, la tarta de almendra, carquinyolis o secalls (pastas secas con almendras), casquetes o tortas de alma (rellenas de confitura de calabaza), los crespells (miel sobre hojas de borraja) y la coca con miel.